martes, 16 de septiembre de 2008

Bostezo

Diez y seis minutos de la mañana. Oficina. Vemos el planeta Tierra desde el espacio. Zoom infinito hacia Europa, España, atraviesa nubes, Madrid, mi edificio, atraviesa techos, mi cabeza. Swooooshh.

Delante de mí, un monitor de 22 pulgadas panorámico. A mi izquierda en la mesa, un portátil encendido. Parezco Nacho Cano con tanto teclado delante, o el clásico friki pajero de películas tipo Tomb Raider. Llevo una hora depositado en mi silla con ruedas, bastante cómoda aunque con una insidiosa tendencia a vencerse hacia atrás (lo llaman respaldo abatible, pero también hubiera valido romperriñones) en la que se echan de menos reposabrazos, apoyacodos, algo para que no parezcas un guerrero derrotado durante 8 o 9 horas, en definitiva. ¿Cuál es la diferencia entre ignorancia e indiferencia? Ni lo , ni me importa. Los chistes sin ganas son como las poesías leídas por niños inseguros en el colegio.

Decía que se echaban de menos los sujetaantebrazos (me gusta inventarme nombres, ya ves) a los lados de mi silla. Especialmente para cuando te entra el sopor.

Da igual que no hayas dormido ni mucho ni muy bien como algunos días. Da igual que no te haya dado tiempo a desayunar por las prisas, o que hayas pillado atasco. Salvo algunas afortunadas personitas que van andando o montando en bicicleta al trabajo, convirtiendo así el comienzo de su jornada en una especie de gimkana impredecible, los demás somos carne de bostezo. Algunos tan largos que parecemos entregados tenores mudos, o boas ensayando para un festín.

Bostezo porque tengo cosas que hacer pero me resisto a empezar del todo. Por hacer tiempo para tomar un café, que dos tan seguidos no es sano y además dura poco. Bostezo porque me imagino que la gente a la que tengo que llamar o escribir un mail también está bostezando y me sabe mal interrumpir su despertar. Me estiro para ver si dejo de bostezar. Escribo en el blog para conjurar el hechizo de hastío que la bruja de la improductividad ha lanzado sobre mí. Zorra.

Bostezamos porque en realidad, no creo que nuestra esencia sea estar aquí. No es que no me guste mi trabajo, y valoro el trato con la gente. Tampoco me gustaría quedarme tirado permanentemente. Es algo más de base, es que no creo que lo natural para un animalito como tú y yo sea trabajar ocho o nueve horas para sobrevivir.

Es cutre la queja sin alternativas, de acuerdo. Podían inventar los trabajos por turnos. Veo al del fondo diciendo "ya existen!!". Trabajos rotativos. Un mes en un sitio, otro mes en otro con gente nueva y funciones nuevas. En realidad casi todos podemos hacer de todo, aunque nos guste identificarnos con la especialización. ¿No sería una buena herramienta antimonotonía? Este mes recojo la fresa, el mes que viene estoy en una empresa de márketing. El año pasado en verano me tocó poner daikiris en un chiringuito. Pues yo tengo unas ganas de ser Melchor este año en la cabalgata en Navidad... Y en primavera me voy a dar un curso de español al sur de Francia.

Hmmmmmmmmyaaaaum...

Bostezo sólo de pensar en ser contable. Las diez y media casi. El portátil tiene el salvapantallas activado. También podrían haberlo llamado despiertavagos o videochivato.

Voy por café. Si la silla tuviera aguantacúbitos sería más cómoda para levantarse, seguro.

6 comentarios:

hadanae dijo...

casualidades de la vida...el otro día hablábamos almagriss y yo de lo aburrido que se hace trabajar muchos años en la misma empresa y bla bla bla (bostezo) así que llegamos a la conclusión de que deberíamos cambiar de trabajo cada cierto tiempo...por decreto. Aprender algo nuevo, conocer gente nueva...

abolición de las sillas sin reposabrazos ya!

L o L i T a dijo...

ja,ja...Estamos todos con el mal de cambio de estación! ;) me daré por aludida con algunos guiñitos...pero tambien tiene lo suyo jugarse la vida cada mañana esquivando con la bici a boztezadores, eh??

Yo quiero ser entonces...Chef-astronauta-patinadora-activista de greenpeace-y domadora de conejos para el año que viene! A que Rey Mago tengo que dárselo?XD

ALMAGRISS dijo...

Qué post más empático... desde luego creo que estamos todos más o menos en la misma honda... cubiertos de desidia laboral ;-)
Y deberías ver mi silla de oficina... uf, es para gigantes, apenas me llegan los pies al suelo, y cuando la regulo me golpeo la barbilla con la mesa, jejeje, con este panorama no me preocupan los reposabrazos ;-)
Uuaaaaaaaa

Ramón de Mielina dijo...

Menos mal que no tengo una 22 pulgadas porque no trabajaría, me haría íntimo del Photoshop!!!

Lo que aburre es no tener ya jornada de verano... Y que los días van siendo más cortos... De todas maneras, un voto a favor del otoño, LA ESTACIÓN MÁS BONITA DEL AÑO.

Y... sí... lo aburrido es también es estar mucho tiempo en el mismo trabajo, al menos si se deja de aprender o deja de ser divertido.

Charlie dijo...

Hadanae, tú tendrías que hacer fotos de todos nuestros trabajos. Y cuando te aburras te las hacemos nosotros a ti! ;)

Lolita, es pura envidia de tu trayecto plano y la bici aportada por el ayuntamiento jejeje.

Almagriss, yo creo que los reposabrazos te ayudarían en cualquier caso jaja, cuidado con los piños y la lengua cuando rebotes contra la mesa.

Ramón, siempre la voz de la conciencia, la inteligencia calmada. :) Efectivamente el Photoshop en 22 es una gozada, y efectivamente el fin de la jornada intensiva es un COÑAZO. :)

Besos por doquier.

Anónimo dijo...

Bostezo porque...
...porque me gusta contagiarle el bostezo a mis compañeros y vernos a los tres, bostezando
...porque el médico me ha prohibido el café, y el cola cao no me despertaba ni cuando hacía la egb
...porque ante la NAÚSEA de la vida, que diría Nietzsche, mejor bostezo :-)